José Carlos Mariátegui

“No queremos, ciertamente, que el socialismo sea en América calco y copia. Debe ser creación heroica. Tenemos que dar vida, con nuestra propia realidad, en nuestro propio lenguaje, al socialismo indo-americano. He aquí una misión digna de una generación nueva"

11.6.10

Y finalmente llego el día.


To-do-tran-qui-lo: Este hombre me representa.
Ha comenzado la fiesta mas grosa del mundo. Nos vamos a dejar de boludeces de universitarios pedorros y nos vamos a abocar de manera fanática, pasional, desmedida y popuperonista a vivir el mas grande espectáculo de la historia.
Un mundial que no tiene a las selecciones de Cuba, ni de Venezuela, ni de Bolivia, ni de Irán, ni de Kirguistán, pero si a la de Corea del Norte, que será la abanderada de llevar en alto los trapos de la revolución de Kim Jon Il y sus camaradas.
Brasil es una carreta. Ni Ronaldo ni Ronaldinho son de la partida. Y el gordo Lula que es el que viene inflando a los cariocas a lo largo del mundo, no le da para los cortos. No tienen un delantero como la gente. Ni cuando jugaban con Paulo Silas y el picapiedra de Branco andaban tan mal.
Por nuestro lado, qué podemos decir. Un sueño, una maquina de triturar carne. Comandada por ese semidios que es el Diegote, el mancu y el Doctor, ese ladero de victorias pírricas.
En términos laclauianos, ambos, Diego y el Doctor, el Doctor y el Diego son todo un significante. Una dupla mítica como Aquiles y Ulises, como Napoleón y Tayllerand, como Olmedo y Porcel, como Moria y Susana, Eva y Pocho, Pachu y Pablo. Magia, alegría y eficacia, la sintesis que todos añoran. Lo que el Pueblo demanda. Y otra vez juntos. Comandando los destinos de esta escuadra de soldados hoplitas prestos para un combate a muerte. Con la sabiduría de la Bruja, la belleza de la Pulga, la cumbia del Apache, la fuerza de Mascherano y la, la, la, la leña que reparte el gringo Heinze.
Señoras y señores, no hay nada mas que esperar. La pelota ha comenzado a rodar y el Pueblo reclama una sola cosa. Gloria o Muerte. Traigan la copa de una vez por todas o son boleta.

La Mariátegui.
Con la fuerza de los que no se resignan... a quedar eliminados del Mundial.