José Carlos Mariátegui

“No queremos, ciertamente, que el socialismo sea en América calco y copia. Debe ser creación heroica. Tenemos que dar vida, con nuestra propia realidad, en nuestro propio lenguaje, al socialismo indo-americano. He aquí una misión digna de una generación nueva"

23.7.12

Información Importante: Sobre las (ya no) Becas de Apuntes

Malas noticias: nuevo reglamento. Cómo y cuándo pedirla.
El martes 10 de julio el Consejo Directivo votó en forma expeditiva el Programa de Apoyo Complementario a Estudiantes en Situación de Vulnerabilidad “Arturo Jauretche” que suplanta el ya tradicional sistema de becas de apuntes SEUBE-CEFyL mediante una “asignación directa e integral” por cuenta bancaria. Lo votaron consejeros de profesores y graduados, con la abstención de la mayoría estudiantil (La Juntada) y el voto en contra de la minoría (PO). Abajo analizamos las diferencias e informamos cómo se tramita, pero antes veamos una breve reflexión.
Esta reforma fue cristalizando en el contexto de ajuste de las becas del primer cuatrimestre (solicitudes rechazadas y demora de dos meses en asignar las becas), mediante un proyecto presentado por las agrupaciones kirchneristas-trincheristas del FUP, quienes –con la anuencia del decanato- criticaban al sistema de becas por dos motivos:
1- No elimina la deserción estudiantil dado que solo atiende la necesidad de los apuntes y no otras. 
2- La administración del CEFyL es deficitaria o, más aún, son chorros, y hacen un uso político de las becas; y hay que eliminar intermediarios y corporaciones.
Si bien el dinero de la nueva “asignación integral” lo podes usar para cualquier necesidad (apuntes, pasajes, impuestos, etc.) es la misma suma, no te asignan más según los rubros de tus necesidades; y respecto a la administración cuestionable del CEFyL, eso se cambia disputando su proyecto político desde el propio movimiento estudiantil, además que nada se está diciendo sobre el manejo espurio de las finanzas de la facultad bajo el trincherismo y el manejo político de las becas por parte del decanato. Entonces, el nuevo reglamento no resuelve ninguna de estas dos críticas, mas allá que discursivamente se presenta como la herramienta para que la universidad se pinte de pueblo.
El sistema de becas de apuntes surgió hace dos décadas, utilizando financiamiento de la facultad (recursos propios: laboratorio de idiomas) y del Centro de Estudiantes. Permitió a muchísimos estudiantes sostener sus estudios y redujo en cierto grado la deserción estudiantil. La relación Facultad-CEFyL hizo posible que la presión de los estudiantes movilizara a las agrupaciones y la dirección del CEFyL para frenar los constantes intentos de recorte por parte de las autoridades. Fue quizá el mayor y continuo proceso de apropiación del Centro y la facultad por parte de los estudiantes para sostener la matrícula. Ahora, la relación CEFyL-facultad deja lugar a la relación de cada becario con las autoridades, perdiendo aquel la instancia colectiva para expandir los beneficios y para combinar ambos espacios (fondos de la facultad y del CEFyL) dado que la facultad determinará de antemano cuantas becas se otorgarán y cual será el monto, y luego lo deposita en una cuenta de un banco privado.
Ahora se argumenta la libertad del estudiante beneficiario para usar el dinero en lo que quiera, pero no se contempla la libertad para elegir este nuevo sistema o el anterior si es que a dicho estudiante le resulta mas práctico y mejor el anterior sistema de becas. Es la institución la que decide por vos a título de “ampliar libertades individuales”, con el discurso de terminar con los intermediarios y corporaciones como el CEFyL. Sin embargo, la “libertad” que defiende el trincherismo es la libertad de empresa (mas bien el libertinaje, si consideramos los negociados editoriales como CADRA, al que está ligado Trinchero). El estudiante en vulnerabilidad, aislado pero “libre”, antes –cuando era “corporativo”- tenía un lugar donde conseguir los apuntes gratuitos o económicos, ahora irá con los pesos de su asignación como cualquier consumidor pagando el precio de mercado, y la intermediación de la corporación de profesores garantizará la afluencia a las fotocopiadoras privadas.
Nos parece muy bueno que se destinen fondos para cubrir distintas necesidades de los estudiantes en vulnerabilidad, pero aquí se utilizan menos fondos (la misma partida que antes disponía la facultad para las becas y sin la incorporación del respaldo del CEFyL para costear los apuntes) y con mayores requisitos. En todo caso, nos parece conveniente mantener el anterior sistema y generar uno nuevo para otras necesidades, simplificando los procedimientos para que no sirvan de filtro.
Sin duda que el sistema tradicional podía mejorarse. Hace años venimos presentando expedientes solicitando mejoras del sistema de becas: que cubra la tercer o cuarta materia de los becarios Sarmiento, el material del Laboratorio de Idiomas (equivalente a los niveles de las carreras), que contemple a los que rendirán libre sin cursar, etc. Sin embargo, nunca fueron considerados por la SEUBE y el Consejo Directivo.
Por otra parte, vemos como positivo que se busque financiamiento del ámbito público (ministerios, UBA) para atender a los estudiantes en vulnerabilidad. Pero la facultad argumenta la necesidad del nuevo reglamento dado que sería exigido por los organismos que podrían financiar  y también por exigencia de la auditoría. Sin embargo, se puede mantener el sistema tradicional (cambiando su nombre si es necesario) más allá de un programa futuro con financiamiento público externo, y no creemos que los organismos auditores determinen para qué utiliza sus fondos la facultad sino cómo los rinde y documenta.
Lo que oculta este nuevo sistema es la constante política del decanato para recuperar el control absoluto de los recursos propios, esos fondos que en gran medida provienen de los estudiantes (masa importante de los cursantes del Laboratorio de Idiomas) y cuyos balances se dibujan ante un Consejo Directivo manejado por la corporación oficialista. Si el nuevo sistema pretende optimizar recursos a favor de los más necesitados, tengamos presente que el decano y sus funcionarios no están en situación de vulnerabilidad y por ende es lógico volcar a la comunidad universitaria dichos recursos de oscuro manejo.
También se argumenta que el nuevo sistema será más eficiente. Pero la evaluación que se pretende –mediante trabajadores sociales- de la situación de los becarios Sarmiento para otorgarles beca del 100 o del 50 %, o no otorgarles, es un despilfarro de recursos dado que dichos estudiantes ya fueron evaluados por la UBA en el momento de la asignación de la ayuda económica: está claro que dichos becarios no pueden sostener por si mismos el costo de los estudios.
Además del ajuste ya en marcha, el proyecto es una propaganda política que pretende emparentarse con la asignación universal por hijo a nivel nacional. Sería algo así como decir que la facultad tiene a través de la SEUBE una filial del Ministerio de Desarrollo Social. Con esa “política de inclusión social” los gerentes trincheristas harán politiquería para obtener recursos y prebendas en organismos oficiales, y no precisamente pensando en los mas vulnerables.
El FUP fundamenta este proyecto en los 20 años que viene realizando trabajo en los barrios, y ahora –mediante un acuerdo con el decano- dicen generar “por primera vez” una ayuda para los mas necesitados, haciendo tabla rasa con un sistema que hace 20 años vienen utilizando y defendiendo estudiantes que no viven necesariamente en la torre de marfil de los funcionarios trincheristas sino en los barrios.
Queremos manifestar que discrepamos tanto del planteo de los trincheristas del FUP como del PO (ambos coinciden –con opuesta valoración– en que la acción decanal sobre las becas es un reflejo de la acción del gobierno nacional), creemos que aquí tenemos una disputa al interior de la facultad que ya lleva dos décadas, y que el decanato puede desarrollar una política nefasta al margen de su adhesión o no a los gobiernos nacionales de turno. Negar esa particularidad es negar el protagonismo que supo desplegar el sector social mas necesitado de los estudiantes en todos estos años en relación a las becas.
A todo esto, la conducción del CEFyL (La Juntada), inicialmente mostró un fervoroso rechazo (difundían el costo de los apuntes para demostrar que era necesario un incremento del monto de las becas, y luego decían que el proyecto oficialista estaba “plagado de errores y horrores, era inaplicable y buscaba pasar por encima de la voz y las necesidades  de estudiantes”) pero fueron bajando los decibeles hasta el trágico episodio final con un abstencionismo cándido, sino cómplice.  ¿Qué pasó entre medio? Lo desconocemos, aunque lo intuimos. Esto demuestra su renuncia a pelear por las becas y desentenderse de los estudiantes más necesitados. Así como la presión colectiva del viejo sistema de becas operó sobre las autoridades para comprometer fondos, también hizo lo propio sobre las distintas conducciones del CEFyL. Para la Juntada, mas allá de un necesario discurso combativo que calme las conciencias de izquierda light, es también un alivio eliminar esa presión desde abajo. Ahora ofrecerán asesoramiento a los estudiantes que en forma individual tengan que lidiar contra la intransigencia decanal, pero dejando en claro que –en lo concreto- es un problema de dicho estudiante, como cuando te cagan injustamente en un final.
Finalmente, señalamos que resulta inapropiado que se aplique el nuevo reglamento en el segundo cuatrimestre y no a partir del año próximo, dado que muchos de los becarios del primer cuatrimestre continuarán en el segundo y es probable que con las nuevas restricciones no les otorguen la beca en 2013, por lo tanto es un despropósito que tengan que tramitar la cuenta y demás por solo un cuatrimestre. 

Veamos ahora algunas diferencias entre el viejo y nuevo sistema:
Destinatarios: antes se becaba al 100 % a estudiantes discapacitados, becarios “Sarmiento” de ayuda económica de la UBA, ex combatientes de Malvinas y no docentes; el resto de la población estudiantil podía recibir beca del 100 o del 50 % según su situación socioeconómica. Ahora se separa a los becarios “Sarmiento” y estudiantes discapacitados que pueden recibir del 50, del 100 % o nada según disponibilidad financiera de la facultad, y se elimina la beca para no docentes (lo deben incluir en las paritarias con la patronal).
Requisitos y documentación: a los existentes se agrega fotocopia de CUIT-CUIL, constancia de alumno regular, regularizar cuatro materias al año, copia de partida de nacimiento de hijos y abrir una cuenta en el Banco Santander Río con diferencia de trámite según la edad.
Implementación: antes con tu carnet de beca retirabas los apuntes del CEFyL pagando la mitad del precio o nada según tuvieras beca del 50 o del 100%; el Centro de Estudiantes reclamaba por las becas no otorgadas, las otorgadas con menor cobertura, las presentadas fuera de tiempo y por la demora en la asignación. Ahora te depositan dinero en la cuenta que te hacen abrir y con eso pagas los apuntes al precio de mercado.

INFORMACIÓN PARA TRAMITAR LA BECA-ASIGNACIÓN:
Entre el 23 de julio y el 18 de agosto sólo por www.filo.uba.ar. La documentación la podés entregar hasta el 24 de agosto.

REQUISITOS: ser alumno regular, cursar en forma presencial y tener cuatro materias regularizadas al año, no se puede pedir si solo te restan finales o tesis para terminar la carrera, ni si ya tenés un título. Hay que abrir una cuenta en el Banco Santander Río aparentemente antes de saber si te asignan la beca.

DOCUMENTACIÓN A PRESENTAR: Copia de DNI o Libreta Universitaria (primera y segunda hoja); Constancia de CUIL o CUIT (si corresponde, lo consultas en www.anses.gov.ar en "Constancia de CUIL", a la izquierda de la pantalla); Copia de ABL, impuesto de rentas y contrato de alquiler en caso de que la vivienda sea alquilada; Copia del último recibo de sueldo del solicitante y convivientes o declaración de los ingresos mensuales en caso de ser autónomos (desocupados y trabajadores en negro también pueden solicitar); Copia de la partida de nacimiento en caso de tener hijos; Copia del comprobante de inscripción a cursada; Certificado de alumno regular.
Todo lo que no encaje en el formulario electrónico o la documentación que no se disponga, aclararlo en carta dirigida a la SEUBE.

APERTURA DE CUENTA EN EL BANCO SANTANDER RÍO 
- Por internet : https://www.santanderrio.com.ar/exec/solicitudes/FormularioSupercuentas.do
hay que poner que tenes un servicio a tu nombre aunque no lo tengas.
- Por teléfono: 0800 999 2400; entran por la Opción 3 (Préstamos personales) y decir que es para apertura de una cuenta de la Universidad.
- Para
los mayores de 30 años: deben ir personalmente a las sucursales que abajo se mencionan con DNI y CUIT O CUIL.
- Hay que tener: número de CUIT, CUIL o CDI.
- Hay que decir:
1) Que querés abrir una Súper Cuenta 1 UNIVERSIDAD, que es para UBA FILOSOFÍA Y LETRAS
2) Que eligís como sucursal de apertura la Nº 226 “Pedro Goyena” (Av. J. B. Alberdi 1617) o Nº 480 “Primera Junta” (Rosario 804).
 - Cuando SEUBE te avisa, vas con el DNI a la sucursal para firmar y así desbloquear la cuenta.
- Tarjeta Banelco y claves: las envían a tu domicilio.

LOS QUE TIENEN BECA DEL CUATRIMESTRE ANTERIOR SOLO LLENAN EL FORMULARIO ON LINE Y NO TRAEN LA DOCUMENTACION, PERO APARENTEMENTE DEBEN ABRIR LA CUENTA EN EL SANTANDER.
Por problemas con la solicitud, requisitos y asignación de la beca, no dudes en escribirnos.